martes, 15 de diciembre de 2009

inmigrantes en españa


Inmigrantes en España

1.647.000 inmigrantes comenzaron el año 2004 como residentes legales en España. De ellos, 276.000 consiguieron sus papeles a lo largo de 2003.
Sin embargo, no todos corrieron la misma suerte ya que, en los mismos 12 meses, 92.679 personas que se encontraban en situación ilegal fueron repatriadas a sus lugares de origen. El 25% llevaba un tiempo viviendo en nuestro país, pero el resto fueron detenidas en las fronteras antes de poder cumplir su sueño. Muchos de ellos, 19.176, fueron interceptados cuando intentaban alcanzar las costas españolas a bordo de embarcaciones ilegales.
Éstos son los datos que se desprenden del Balance sobre Inmigración en el año 2003 elaborado por el Gobierno. Según estas cifras, cerca de 963.000 extranjeros figuran ya en las listas de la Seguridad Social, 95.000 se dieron de alta en 2003, lo que se traduce un 5,71% de los trabajadores afiliados.
PROCEDENCIA Y DESTINOLos inmigrantes procedentes de América Latina son los más numerosos, llegado a alcanzar las 514.000 personas en situación regular. Los siguen de cerca los africanos, que son ya 432.000 y aquéllos que han emigrado de países pertencecientes a la Unión Europea, 406.000.
Las comunidades autónomas de Cataluña y Madrid son las que más inmigrantes acogen, seguidas por Andalucía y Valencia.



Tráfico de personas
Un negocio mayor que el de la droga Por Marta Arroyo
La jornada laboral de Ana Belén Macías depende del viento. Si hay Levante, podrádedicarse a la tareas cotidianas del Centro de Primera asistencia de Cruz Roja de Tarifa. Pero, si sopla Poniente, las alarmas se disparan. El mar en calma es sinónimo de la llegada masiva de pateras desde el otro lado del Estrecho y hay que estar preparado para actuar.
La desesperación de los más pobres es una inagotable fuente de ingresos para las mafias que se dedican al tráfico de personas, un negocio que mueve cada año unos 7.000 millones de dólares. Esta cifra supera a la del tráfico de drogas, según han denunciado Cruz Roja y la Media Luna Roja, durante su Conferencia Regional en Berlín. Se calcula que en todo el mundo hay entre 20 y 40 millones de inmigrantes ilegales, de los cuales tres millones viven en Europa occidental.En cuanto las patrulleras de la Guardia Civil divisan una embarcación a la deriva avisan al Centro de Cruz Roja. Inmediatamente, el médico, los voluntarios y las ambulancias parten en dirección a la playa o al puerto, listos para atender cualquier emergencia. "En cada patera viajan hacinados unos 40 inmigrantes sin papeles. Cuando llegan a tierra, el 75% necesita atención médica", explica Ana Belén. Sólo el pasado año, 10.366 personas fueron atendidas en las costas españolas. Atención inmediata Hipotermia, quemaduras y traumatismos diversos son las secuelas más comunes de su incierto viaje hacia un futuro mejor. Una travesía en la que han invertido todos sus ahorros y esperanzas. Nada más poner los pies en suelo español, los inmigrantes son sometidos a un triaje, un examen general para valorar su estado. Si no necesitan hospitalización, son trasladados a la Isla de las Palomas. En este antiguo cuartel militar convertido ahora en centro de acogida se les practica un reconocimiento más exhaustivo y se procede a efectuar las curas pertinentes. Billete de vuelta
Los subsaharianos son registrados, se les entrega un documento donde les informan de que en 15 días deben abandonar España. Debido a la inexistencia de tratados de extradición con sus respectivos países de origen, normalmente quedan en libertad. Los marroquíes, sin embargo, son trasladados a la comisaría de Algeciras y desde allí, embarcados en el Ferry que les devolverá de nuevo a su país. “Las mujeres embarazadas o con niños pequeños acaban en muchos casos en albergues como el de la Cruz Blanca, donde el padre Isidoro, más conocido como Fray Patera, las acoge hasta que alguien las reclama y siguen su particular huída hacia delante.Independientemente de su buena o mala suerte, estos hombres y mujeres han tenido que pagar un alto precio para poder arriesgar su vida en el Mediterráneo. Ana Belén y sus compañeros han atendido a inmigrantes que intentaban instalarse en España por tercera o cuarta vez y han sido detenidos. Ellos saben que, en cuanto reunan el dinero necesario, lo volverán a intentar, porque cuando no se tiene nada, no hay nada que perder.
Las mafias de inmigrantes utilizan ancianos

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Cómo no perjudicar el medio ambiente

Estas son algunas sugerencias para tratar el medio ambiente con el mayor respeto posible:
  1. En los viajes procura emplear el transporte público, y si es tren mejor que mejor.
  2. Intenta desplazarte a pie donde quiera que estés: se aprecia mejor el paisaje, se puede hablar con la gente y es una forma de romper con el ritmo frenético y estresante de la vida urbana a la que estamso sometidos la mayoría de nosotros.
  3. Si estás en el campo o en una montaña, no hagas fuego -es muy peligroso- ni dejes basura cuando te vayas ni tires nada al suelo (un incendio puede comenzar con un trozo de cristal que se ha caído a alguien).
  4. Utiliza electrodomésticos ecológicos: consumen menos energía y gastan menos agua.
  5. La ropa usada no la tires al contenedor de la basura: existen contenedores de ropa y calzado, donde se recoge y se distribuye después entre gente que la necesita.

Medio ambiente

Medio ambiente

martes, 24 de noviembre de 2009

Sugerencias para un mejor medio ambiente

Estas son las sugerencias para que el medio ambiente no acabe degrándose más de lo mucho que ya está:


  • Recoger en un cubo el agua que sale mientras esperamos a que llegue el agua caliente a la ducha, y emplear lo recogido para el retrete.

  • Ducharse en lugar de bañarse, pues se gasta mucha menos agua.

  • Abrir la ducha sólo para empezar y para aclararse, dejando el grifo cerrado mientras nos enjabonamos.

  • Utilizar lavadoras y lavavajillas de bajo consumo, pues necesitan menos energía y consumen menos agua.

  • Usar bolsas de cartón o reciclables, porque las bolsas de plástico no lo son y contaminan una barbaridad.